Huella ecológica

Este fin de semana visité las comunidades que habitan el río Caquetá, en límites entre los departamentos de Putumayo, Caquetá y Amazonas. Con gran admiración encontré una selva humanizada, personas con necesidades, pero conscientes de la importancia de mantener y conservar nuestra Amazonía como el pulmón del mundo. Recordemos que el 20 por ciento del oxígeno del planeta se genera allí.
Para quienes no han tenido la maravillosa oportunidad de visitar nuestra riqueza natural, es importante entender que lo que pasa en la Amazonía nos afecta a todos. Allí el dióxido de carbono es capturado por los árboles y como residuo recibimos de la fotosíntesis, el oxígeno, necesario para la existencia.
Discutiendo con los directivos de las fundaciones Bosques de la Amazonía, Asomaca, Saving The Amazon y en especial con el ingeniero forestal Daniel Machado, se resaltó la problemática de los habitantes y la falta de oportunidades que han generado pérdida de la biodiversidad en los bosques de Colombia. El uso adecuado del suelo es netamente forestal, y el cambio de la cobertura boscosa, para la ganadería extensiva, es la principal causa de la deforestación.
El reto es generar un modelo de desarrollo sostenible, para que sus habitantes puedan vivir del bosque y garantizar que las generaciones venideras, tengan la oportunidad de disfrutar de un ambiente sano.